Si sigues bailando con el diablo, un día puede seguirte a casa
Ryan Coogler ha llevado al cine en innumerables ocasiones historias cargadas de discursos políticos y sociales con las que fácilmente podemos sentirnos identificados, como pasó anteriormente con Black Panther y Creed. Ahora, Coogler ha tomado una historia familiar personal con un trasfondo sobrenatural, convirtiéndola en lo que muy posiblemente sea una de las mejores películas del año.
Stack y Smoke (Michael B. Jordan) son unos gemelos que, tras abandonar la mafia liderada por Al Capone en Chicago, deciden regresar a su tierra natal en Missisipi con el objetivo de abrir un club de blues dirigida hacía su comunidad negra. Todo cambia cuando esa misma noche tocan a la puerta del club tres hombres blancos, quienes esconden un secreto siniestro detrás de su aparente amabilidad.
Debo decir que la película es magnífica de inicio a fin. Y es que la visión que nos trae Coogler en esta ocasión se ve complementada perfectamente con la historia e interpretación de su cast, empezando por Michael B. Jordan, ya que se nota que ambos han formado una dinámica única tras bambalinas, pues esta marcaría la quinta ocasión en la que trabajan en un largometraje juntos.
Me gustaría dividir la película en dos partes: la parte dramática (que también nos sirve como introducción) y su contraparte desarrollada por el ocultismo. Durante la primera parte de la película conocemos a los gemelos Stack y Smoke, su relación con el joven Sammie (Miles Caton) y las motivaciones de cada uno. También se nos introducen los personajes de Mary (Hailee Stainfeld), Pearline (Jayme Lawson), Annie (Wunmi Mosaku) y Grace Chow (Li Jun Li), cuatro mujeres con historias distintas, pero conectadas por la atracción hacía distintos hombres.
La primera en aparecer en pantalla es Hailee Stainfeld, la cual es simplemente magnífica. Creo que nunca había visto una cinta que la llevara a tantos extremos emocionales como lo ha hecho Pecadores, especialmente durante la mitad del arco argumental de su personaje.
Wunmi Mosaku (Annie) nos deja otra fantástica interpretación en pantalla, quien es fundamental para que los demás puedan entender lo que está por desarrollarse debido su conexión con lo oculto. Así mismo, Li Jun Li (Grace Chow) es otra cara de la misma moneda, motivada enteramente por el miedo a perder a alguien amado.
Ahora, es turno de hablar de los que para mí son las verdaderas estrellas de esta cinta: Miles Caton y Jayme Lawson. Miles Caton con apenas 20 años nos ofrece un derroche de talento tanto actoral como musical en pantalla, protagonizando la mejor escena de la película, la cual fue ejecutada bellamente con una coreografía y plano secuencia impresionantes. Jayme Lawson también nos muestra los límites a los que puede llegar no solo con su interpretación, pues también nos ofrece una secuencia musical increíble.
Ambos son la gran sorpresa de esta cinta, y definitivamente me gustaría seguir viendo más de ambos. Además, la banda sonora, interpretada por el fenómenal Ludwig Göransson (The Mandalorian) es la cereza en el pastel.
La segunda parte de la película se trata sobre la introducción del ocultismo al mundo de Stack y Smoke, quienes son completamente incrédulos ante este tipo de fenómenos. Me gustaría abordar esto sin muchos spoilers, así que solo diré que el papel de Jack O’Connell es grandioso, aunque me hubiera gustado ver desarrollada más esta parte, especialmente al introducir elementos como lo son el Ku Klux Klan. Me parece fascinante que, pese a tener todos elementos, Delroy Lindo como Delta Slim no solo brilla como el alivio cómico, sino como un personaje bastante entrañable también.
Pecadores es una cinta increíble. No solo desarrolla un drama digno de la época, sino que introduce elementos del ocultismo de forma que es interesante ver cómo se desarrolla en sus personajes que, ya de por sí, están enfrentando diversos problemas. Ryan Coogler logra traer un producto creativo realmente completo, que vale totalmente la pena disfrutar en pantalla grande.
¡Ya puedes ver Pecadores en todos los cines!
Agradecemos enormemente a Warner Bros. Pictures México por invitarnos a la función de prensa.